Beneficios de crecer con mascotas
Muchos son los niños que sueñan con tener en casa un animal de compañía: perro, gato, pez, roedor… Y si pueden ser varios a la vez, mucho mejor ¿te suena, verdad? Y es que todos hemos sido niños y hemos tenido este sentimiento: el de tener un compañero de juegos, un amigo para toda la vida. Si tú has crecido con animales en casa debes de saberlo, pero lo que quizás no sepas ahora como adulto, son todos los beneficios para el desarrollo del niño que puede ofrecerle. ¿Quieres saberlo? ¡Sigue leyendo!
En primer lugar, creemos indispensable hablar de la relación que se crea entre niño-mascota. Muchas veces, a ojos de nosotros, los adultos, parece inexplicable. Nosotros “la gente mayor” usamos códigos y comportamientos muy difíciles de entender por ellos, sin embargo, un perro puede ofrecerle lo que nosotros no le podemos dar: un compañero de juegos que puede comunicarse con el niño a su mismo nivel. Si el perro está contento, lo está, sin dobles sentidos, y generará una autoestima y confianza en el niño desde el primer momento. Aquellos niños retraídos y con problemas de socialización, encontrarán en ellos la seguridad que necesitan y que “el mundo real” no consigue darles. En pocas palabras, favorece el desarrollo cognitivo, socioemocional y físico de los niños.
El tener que cuidar de él también genera otro beneficio, el del sentido de la responsabilidad. Darle de comer, sacarlo a pasear, jugar con él… crean en el niño un sentimiento de utilidad y motivación en ellos. Además, aprenderá a tener que cuidar de otro ser vivo, es decir, aprenderá de las necesidades de los demás y no sólo de las suyas, por lo que desarrollará también la capacidad de empatía en el niño que le beneficiará en su desarrollo.
Si la mascota que ha elegido es un perro, por ejemplo, le “obligará” al niño a no tener una vida sedentaria. Jugar con él, llevarlo al parque, pasear, hará que el niño se levante del sofá, se despegue de la televisión, de los videojuegos o de la tablet y salga a la calle con él.
Uno de los beneficios más importantes son los valores que una mascota puede aportar a un niño. Un ejemplo de ello puede ser el compañerismo, el respeto y la fidelidad. Los niños que crecen así crecen y se desarrollan socialmente mucho más felices y aprenden a quererse y a valorarse a sí mismos de una manera natural.
¿Sabes que también les aportan beneficios para la salud? Muchos pensarán que puede ser contradictorio, pero no. La llamada “hipótesis de la suciedad” dice que demasiada higiene en edades tempranas debilita su sistema inmunológico en un futuro. Es cierto que quienes tenemos mascotas, sabemos que nuestros animales están limpios y sanos, aun así no debemos obviar este punto. No sólo aporta este beneficio a su salud. Muchos estudios afirman que además, disminuye el riesgo del niño de padecer alergias y asma hasta en un 50%. Esto es así porque convivir con perros, por ejemplo, eleva los niveles de endotoxinas en el ambiente, que fortalece el sistema inmunológico del pequeño.
Otro de los beneficios que aportan las mascotas es que les enseñan, sin quererlo, leyes de vida. Cosas tan naturales como el parto, la reproducción o la muerte la aprenden de manera mucho más natural por este medio que si otro ser humano intenta explicárselo.
Si la mascota de compañía de tu hijo o hija por ejemplo, es un perro, que no te quepa duda de que le enseñará expresividad, lealtad y aceptación. Le enseñará a disfrutar de las pequeñas cosas y a saber estar solos. Por el contrario, si la mascota es un gato, ten por seguro que aprenderá valores de autonomía, independencia, saber decir ‘no’ y a ser observadores.
Volviendo al principio, quienes nos hemos criado con animales de compañía desde nuestra infancia, sabemos que no cambiaríamos por nada del mundo esta experiencia ¿verdad?
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